(Del lat. rarus).
1. adj. Que se comporta de un modo inhabitual.
2. adj. Extraordinario, poco común o frecuente.
3. adj. Escaso en su clase o especie.
4. adj. Insigne, sobresaliente o excelente en su línea.
5. adj. Extravagante de genio o de comportamiento y propenso a singularizarse.
6. adj. Dicho principalmente de un gas enrarecido: Que tiene poca densidad y consistencia.
Ernesto ha recibido un meme, y lo ha enviado, entre otros, a
la filóloga y a
Peggy; esta última me lo rebota a mí. Con esta especie de party line (qué antiguo suena eso) me entero de las rarezas de gente conocida, pues de eso va precisamente, de contar 6 rarezas de uno mismo. Y como lo raro es que desaproveche una ocasión de hablar de mí mismo que es, lo admito, mi tema favorito, pues aquí van 6 cosas que me convierten en un ejemplar escaso en mi clase o especie, a la vez que excelente en mi línea, e incluso propenso a singularizarme por mi poca densidad y consistencia:
1.- Me gustan los cocodrilos. Colecciono cosas de cocodrilos: mi última adquisición es una marioneta de mano de un cocodrilo, que he comprado en un mercadillo la semana pasada. Tengo un cuento sobre cocodrilos escrito en holandés dedicado por su autora (si alguien entiende holandés se lo escaneo y se lo envío, que me encantaría saber qué le sucede al cocodrilo protagonista). Incluso he visitado una granja de cocodrilos y me he hecho una foto con uno pequeñito en el cuello.
2.- Soy prepuntual. Llego a los sitios mucho antes de la hora. En consecuencia, me paso la vida esperando por los demás. Nunca he perdido un autobús o un avión. Ojo, no es una virtud, es un defecto que irrita a mucha gente.
3.- Hablo inglés medianamente bien pero, ay, no lo entiendo. Es un gran problema cuando viajo, ya puedo plantear correctamente preguntas en ese idioma, pero no comprendo las respuestas que recibo. Es lo que tiene haber aprendido viendo películas subtituladas en la tele portuguesa.
4.-He tenido varios tics nerviosos, entre ellos uno muy gracioso en una mano consistente en el movimiento de acelerar una moto. En mi casa, muy originales ellos, le llamaban la moto. Todos han desaparecido, pero reaparecen cuando me acuerdo de ellos. Sí, ahora estoy acelerando.
5.- No puedo tener las dos manos ocupadas. Si llevo varias bolsas, cargo con todas ellas en una mano.
6.- En algunos ratos libres, escribo cosas raras para que las lean en internet algunas personas que no conozco, y yo mismo leo las cosas raras que esas personas escriben a su vez.
Emplumo el meme a
Dinintel y a
Enna, si tienen la bondad, que quiero enterarme de lo raros que son.
Jeje, ahora yo me pregunto quién establece los márgenes de la normalidad, jajaja.