21 diciembre 2006
Comidas de empresa


A la comida de navidad del curro hay que ir. Es obligado por muchas razones, pero quizás la fundamental es algo tan simple como que hay que estar presente para que se hable de otros y no de uno. Siempre se despelleja a los ausentes.

La ceremonia comienza con la elección de asiento. Es un momento importante, pues nadie quiere pasar tres horas con compañeros a los que no dirige la palabra en todo el año. Normalmente no se conoce la disposición de la mesa, así que es habitual un primer momento de nerviosismo antes de ubicarse evitando, en lo posible, a los colegas con los que hay menor afinidad. Los más experimentados acceden al recinto con su grupo. Los rezagados serán la compañía del jefe.

Las conversaciones siempre derivan hacia dos temas: la propia comida y el propio trabajo. En ambos casos siempre hay descontentos que se hacen notar. El alcohol deshinhibe, las rivalidades soterradas durante el resto del año afloran, y se hacen confidencias al grupo de las que habrá que arrepentirse despues. Conviene, por tanto, moderación.

Si se trata de una cena un sector de la oficina aparecerá con sus mejores galas, para rechifla del resto. Para muchos es la única noche del año en la que se sale sin la pareja y se ponen en ella grandes expectativas, convencidos de que quienes no tenemos responsabilidades familiares vivimos inmersos un una juerga permanente en la que ellos pueden participar solo una vez al año, precisamente esa. Este grupo será el que mayores cogorzas pille -escasa tolerancia al alcohol- y acumulará mayor riesgo de hacer el ridículo. El oprobio se prolongará al día siguiente al pasear la resaca por la oficina.

Son buenas ocasiones para que los pelotas desplieguen todas sus habilidades con sus superiores. Como poco se prestarán a hacerles compañía para aliviarles la sensación de estar fuera de lugar que les acompaña toda la comida, plagada de silencios incómodos. Si el jefe es sensato se largará a los postres, consciente de que al salir del local se convertirá en el principal tema de conversación.

Las comidas de empresa explican hoy en día buena parte de la facturación de los restaurantes y justifican importantes despliegues de la guardia civil para realizar pruebas de alcoholemia. Se han convertido en el inevitable coñazo con el que se abre la temporada navideña, como los anuncios de perfumes con acento francés o la compra de lotería.

Respiro aliviado. Yo ya he pasado la mía ayer.
 
posted by Andrómena at 10:21 a. m. | Permalink |


8 Comments:


  • At jueves, 21 diciembre, 2006, Anonymous Anónimo

    a ver, a ver....pero no es justo, no nos cuentas como ha ido tu cena, ni siquiera a que grupo perteneces, si al de los patéticos casados y con obligaciones que en esa noche hacen el ridículo seguro, o al de los habituados al alcohol y a las juergas nocturnas...asi que...a largar!!!!

     
  • At jueves, 21 diciembre, 2006, Anonymous Anónimo

    porras...que siempre se me olvida...soy enna!!!!!

     
  • At jueves, 21 diciembre, 2006, Blogger Andrómena

    JAJAJAJA

    Durante algún tiempo pertenecí al grupo más patético de todos: los jefes.

    Ahora, una vez he renunciado a los galones, tolero bien el alcohol y aguanto hasta el final :-)

    Ayer hubo de todo, incluso momentos tiernos. Hoy no tengo resaca.

     
  • At jueves, 21 diciembre, 2006, Anonymous Anónimo

    A mi me toco hoy la comida , corroboro todo , lo de los casados deseosos de juerga mas , es una motivo para prolongar la comida hasta la madrugada .....y lo de ser jefe , claro que crea un vacio en la relacion con los demas , pero va en el cargo , y hasta te diria que es bueno , cuanto menos personalmente sepan de ti mejor .El secreto , saber estar , saludar a todo el mundo hablar de trivialidades y retirarse atiempo ...al dia siguiente , los comentarios son lo mejor , siempre algunos se pasan y dan la nota ......:)

     
  • At jueves, 21 diciembre, 2006, Anonymous Anónimo

    Para evitar olvidos, soy Enna, así de buenas a primeras. Pues yo en este aspecto soy bastante virgen, soy una vulgar y corrientucha estudiante de publicidad, que no ha tenido demasiadas experiencias laborales, asi que de momento no me ha tocado ninguna comida ni cena de trabajo...pero cuando sea así a peggy como a ti, andrómeda, os pediré consejo. ok????

    Anda, anda...que seguro que al final lo pasasteis pipa, no seais cobardes a la hora de admitirlo :)

     
  • At viernes, 22 diciembre, 2006, Blogger atuaire

    Me gustó -jajaja- Yo fui a la cena de Empresa de mi pareja. Ella trabaja con sus padres, por lo que la cena fue en casa de mis suegros -jajaja- Vaya panorama.
    La verdad, para echar a correr.
    Saludos Andrómena.

     
  • At viernes, 22 diciembre, 2006, Anonymous Anónimo

    Feliz navidad , saturnales ...año nuevo , saturnales o fiesta invernal que celebres ...kiss:)

     
  • At sábado, 23 diciembre, 2006, Blogger Andrómena

    Felices fiestas Peggy. Lo de las saturnales es sugerente...

     

Layout design by Pannasmontata